Chiquita Movida nos trae ‘Gastos de Gestión’ su carta de presentación
23 de octubre de 2025Chiquita Movida llega con ‘Gastos de gestión’. Por fin alguien viene a recordarnos que el rock también puede oler a gasolina, sarcasmo y resaca emocional
Hay proyectos que llegan para gustar y hay otros que llegan para dar por saco —en el buen sentido—. Chiquita Movida pertenece con orgullo al segundo grupo. El nuevo experimento incendiario de Rayden, Mediyama y Skiz Siete junto a Babe, Jhonny y Jona es una patada en la puerta de la escena española, un recordatorio de que la música también puede ser una travesura a volumen 10.
Su debut, ‘Gastos de Gestión’, no es un EP: es el recibo que te llega a la vida por existir. Ese suplemento absurdo que nadie pidió pero que llega igual. Y ya que hay que pagarlo, ellos lo cobran con guitarras gordas, ironía sucia y actitud de las que no piden perdón ni cuando afinan.
Nacido en una casa rural durante una semana que suena a birras templadas, charlas a las cuatro de la mañana y cables cruzados por todo el salón, este proyecto empezó “como un juego entre colegas”. Pues ojo con los juegos entre colegas, que luego sale esto y más de uno va a tener que replantearse qué entiende por banda “de verdad”
Track by track a hostia limpia
1. “Gastos de Gestión”
El arranque es una declaración de intenciones: creértelo aunque no te lo creas ni tú. Ese momento en el que sales a la calle con la autoestima en rojo pero con actitud de “hoy la lío”. Una licencia para fliparse sin excusas. Si los datos no acompañan, peor para los datos. Rock desacomplejado, chulería fina y riff para meterse en vena.
2. “Ojos superocho”
El misil anti-nostalgia. Aquí no hay lugar para postureo melancólico ni para llorar mirando por la ventana un domingo. Esta canción te arranca el retrovisor sentimental y te obliga a mirar hacia adelante aunque sea a puñetazos. Guitarras densas como cemento y una mala leche preciosa. El pasado queda como souvenir barato de gasolinera.
3. “La nueva ilusión de”
Aquí se ponen las botas con una crítica afilada a la industria y su hambre eterna de rostros nuevos y almas vacías. Es un dedo corazón envuelto en estribillo. Se ríe del hype, de la moda rápida y del fast-food musical. Si tienes ego frágil y trabajas en discográficas, mejor no escuches esto en horario laboral.
4. “Fotomatón para bodas fallidas”
El golpe emocional del EP y, aun así, también se baila. Ese momento en el que la vida te hace un corte por lo sano justo al final del camino. Una ruptura sin pañuelos ni violines: aquí se llora en movimiento y con los ojos corridos. Drama sí, victimismo cero. Sigue la fiesta aunque huela a incendio.
Conclusión: Bienvenidos al jaleo
‘Gastos de Gestión’ no intenta ser bonito, ni amable, ni fácil. Y gracias a Dios. Se nota la química de banda real, se siente que no hay calculadora detrás del proyecto y se celebra cada puñetazo de honestidad que dejan en estas cuatro canciones. Chiquita Movida ha venido a sacudir el tablero sin pedir permiso.
Este EP es una forma de decir: «Sí, la vida trae gastos añadidos, pero que nos los cobren bailando», Chiquita Movida.
Pónganse cómodos. Esto no ha hecho más que empezar.



