María Becerra encendió Sevilla con su ‘perreo furioso’
21 de enero de 2025La artista argentina inició la temporada de conciertos 2025 en el Cartuja Center Cite con un espectáculo vibrante y lleno de energía.
Un regreso arrollador
El pasado 9 de enero, María Becerra volvió a Sevilla con un show electrizante en el Cartuja Center Cite, marcando el inicio de la temporada de conciertos en la ciudad. A sus 24 años, la artista argentina dejó claro por qué es una de las figuras más destacadas del panorama musical actual.
Acompañada por una banda en directo y un cuerpo de bailarines que no descansó ni un segundo, Becerra ofreció un espectáculo potente, cargado de coreografías dinámicas y efectos visuales. Su voz brilló en varios momentos de la noche, aunque en algunas canciones el alto volumen de la música opacó su interpretación.
Un público estático ante el ritmo
A pesar de la intensidad de la puesta en escena, sorprendió la pasividad del público, especialmente entre los más jóvenes. Mientras la artista repasaba éxitos como Automático, Miénteme o Ojalá, muchos asistentes permanecían quietos, más atentos a grabar el momento con sus móviles que a bailar al ritmo de la música.
Este contraste resultó llamativo, dado que el repertorio de Becerra está diseñado para el movimiento y la euforia. Sin embargo, cuando la cantante interactuó con la audiencia y se acercó al borde del escenario, la respuesta fue inmediata, con gritos y ovaciones.
Un espectáculo completo y frenético
El concierto, que duró cerca de una hora y cuarenta minutos, fue una demostración de lo que Becerra llama su «perreo furioso», con una sucesión de hits que mantuvieron el nivel de energía alto de principio a fin.
Con esta presentación, María Becerra no solo reafirmó su talento vocal y escénico, sino que también consolidó su posición como una de las grandes referentes del pop urbano latino. Sevilla fue testigo de su arrollador paso, dejando claro que su ascenso en la industria no tiene freno.
A continuación os dejamos la galería de nuestro compañero Ángel Martín V.








