«Sueños de libertad»: ¿Qué está pasando con Mafin? 🧁 | ComentRAW IV
15 de junio de 2024¡Bienvenidas a la cuarta entrega de los ResuMafin! Esta semana hemos tenido pequeños momentos que nos han dado fuerzas para seguir soportando las curvas. ¡Vamos a ello!
Como siempre, aquí ResuMafin III tienen nuestro artículo anterior para ponerse al día antes de empezar a leer este resumen.
Capítulo 80: Nuestra semana empieza con una Marta feliz de poder haber sacado la producción de “Anhelos de Mujer” adelante y de la manera más exitosa posible. Joaquín se extraña de ver a nuestra CEO favorita en la tienda tan temprano, cuando aún no habían llegado las dependientas y faltaban horas para el evento de lanzamiento del nuevo producto, Marta le comenta que durmió en su despacho queriendo estar presente si surgía algún inconveniente. Su primo la felicita por su arduo trabajo y se disculpa por no haber confiado en ella desde el inicio, pero Marta le agradece de la forma más honesta posible. Joaquín le confiesa que no es el único que está impresionado y le dice que tiene muchos admiradores en la fábrica, y Marta sin terminar de creérselo del todo, le responde que terminará por hacerla sonrojar.
Entonces Marta tiene un golpe de nostalgia y empieza a recordar lo que eran sus vidas cuando apenas eran unos críos que solo se preocupaban por jugar, sin discusiones ni tantos problemas entre ellos y sus hermanos; Joaquín afirma que ha pasado mucho tiempo desde eso, aunque la relación entre ambos jamás ha sido la más cercana.
Marta: Bueno, quizá porque era la única niña.
Joaquín: ¿Sabes cómo te recuerdo yo?… Es igual, déjalo.
Marta: No, no, no. Ahora no te lo puedes callar.
Joaquín: Pero no te lo tomes a mal, por favor… Yo te recuerdo altiva.
Marta: ¿Cómo altiva?
Joaquín: Altiva, seria, distante. Me imponías, Marta.
Marta: ¿En serio?
Joaquín: Sí. De hecho, todavía me impones.
Marta: Bueno, imagino que es por haberme criada rodeada de hombres. O me imponía o me pisaban. Me ha costado mucho que me vean como algo más que un vestido bonito.
Joaquín: Pues ahora ya nadie duda de que vales igual o más que cualquiera de tus hermanos.
Capítulo 81: La hora del evento de lanzamiento ha llegado, Carmen y Claudia se dedican a maquillar a las clientas con los productos del cofre de “Anhelos de Mujer”, mientras Fina va recibiendo a las nuevas que van llegando a la tienda y les ofrece una copa de champán. Al poco tiempo llega Marta del brazo de su tía Digna, quien decidió acompañarla en este momento tan especial para ella. Digna felicita a su sobrina por lo bonito que le ha quedado todo y le dice que heredó el buen gusto de su madre.
Carmen convence a Digna para que la deje maquillarse y Fina se acerca con su copa de champán, luego se acerca Marta y le afirma a su tía que Carmen es una maquilladora excelente y la mejor vendedora de la tienda; ese comentario parece haberle sentado mal a Fina, quien se aparta de ellas rápidamente, pero Marta conociéndola va tras ella e intenta sacarle conversación acerca de lo bien que ha salido todo con el lanzamiento; sin embargo, Fina solo asiente y sigue su camino, dejando a Marta cabizbaja.
Más adelante en el capítulo, el evento ya ha terminado en la tienda y Carmen está comentando con Marta que una de las clientas le ha dejado un billete de cien pesetas, pero Marta no se extraña en lo absoluto y la vuelve a alabar por el arte que tiene para maquillar; entonces Fina aparece para darle la razón a Marta y felicitar a su mejor amiga. También aprovecha para pedirle perdón por su mala actitud cuando propuso la idea de maquillar a las clientas para el lanzamiento.
Después de preguntar por la ausencia de Claudia en ese momento, Marta propone inmortalizar el momento pidiéndole a la fotógrafa que las capture con su cámara.
La ultima escena de nuestras chicas juntas en este capítulo, se da cuando ya no queda nadie más en la tienda aparte de ellas dos. Ambas tienen una copa de champán y se disponen a brindar.
Marta: Por el éxito de este nuevo producto… y porque todos los anhelos se cumplan algún día.
Chocan sus copas mientras se miran intensamente, entonces Marta decide hablar de nuevo.
Marta: Siento si lo que te he dicho antes sobre Carmen te ha molestado.
Fina: No te preocupes. Si es que es verdad, Carmen es la que vende mejor.
La jefa de la tienda sonríe mientras que a Fina se le ocurre una idea.
Fina: Tú eres la única que no ha pasado por nuestras manos.
Marta: ¿Quieres maquillarme?
Fina: ¿Tú quieres?
Marta: No sé, ¿qué me harías?
Fina: Yo te aplicaría un poquito de maquillaje aquí, en el pómulo, pero muy ligero, porque tienes un brillo especial en la piel y seria una pena taparlo.
La mano de la dependienta recorre desde el pómulo hasta el mentón de Marta y la tensión escala en cuestión de segundos, Marta permanece inmóvil sin quitar la mirada de Fina hasta que logra reaccionar y la coge de la mano. En ese momento Marta le dice que cree que tiene que contarle algo, duda por un momento, pero acaba contándole que está en busca de un bebé con Jaime; Fina sorprendida le retira la mirada unos segundos, pero termina por felicitarla y desearle que ojalá suceda pronto. Sin embargo, las palabras de Fina no se reflejan ni en su tono de voz ni en su mirada.
Marta: ¿Estás bien?
Fina: Claro. Bueno, a ver, me ha sorprendido un poco, pero al final fui yo la que te animó a que buscaras algo que llenara el hueco. En fin, que os deseo lo mejor. Pasa anda, que te maquillo.
Al final del capítulo podemos ver a Marta conversando con Jaime en la cocina de la casa grande mientras toman una infusión, todo parece ir bien en el ambiente hasta que Jaime se levanta y tiene un mareo muy fuerte que lo hace golpear la taza y voltearla sobre su mano. Marta, que solo se fijo en el daño que se pudo haber hecho con el liquido caliente, no se percata de que su marido está desorientado y este logra esconderlo para que ella no se termine dando cuenta.
Capítulo 82: El día empieza con Marta desayunando con su hermano Andrés, al que le pregunta qué está pasando, ya que se supone que tendría que haberse marchado a Olite con su esposa hace ya varios días y nadie le ha comentado a Marta por qué los planes han cambiado, pero su hermano decide ocultarle la verdad como el resto de la familia.
Después podemos ver a Marta en el salón de la casa grande escribiendo en su diario acerca de la ilusión tan grande que le hace ser madre y poder ver el mundo a través de los ojos de ese futuro bebé.
“Hace ya tanto tiempo que me olvidé de la idea de ser madre, que ahora recuperada la ilusión, no hay nada que me haga mirar al futuro con mayor esperanza. Pensar en ir descubriendo el mundo a través de sus ojos me hace sonreír, y a Jaime, que lo desea por encima de cualquier cosa. Sé que va a ser un gran padre, pero, siendo sincera, si fuera libre no le elegiría para acompañarme en esta aventura, elegiría a la persona con la que descubrí el verdadero amor. A Fina. La añoro, ella es mi vida y sobrevivo sin ella conformándome con el recuerdo de su olor y el calor de su aliento.”
Jaime interrumpe a Marta de sus pensamientos después de dejar su diario abierto sobre la mesa, obligándola a cerrarlo y prestarle atención. Entonces la De La Reina decide darle un voto de confianza a su marido y contarle que escribe para sacar lo que lleva dentro y plasmar en las hojas de aquella libreta lo que siente, Jaime le agradece por compartir esa información con él y Marta le dice que lo hace porque confía en él, ya que siempre ha respetado su privacidad.
El marido de Marta le acerca un ejemplar del periódico en el que hay una reseña acerca del lanzamiento de “Anhelos de Mujer”, donde le dan todo el crédito que merece por sacarlo a adelante, pero Marta ve la foto con Carmen y Fina y se alegra aún más, afirmando que “Un capitán no es nadie sin su ejército, por más galones que tenga”.
Isidro, el padre de Fina y chofer de la familia, entra en el salón en busca de Marta para llevarla a la empresa, aunque el mayor se encuentra un poco pálido, malestar que no pasa desapercibido ni por Marta ni su marido, pero este les afirma que se encuentra bien.
Marta nos dio un susto enorme dejando su libreta sobre la mesa del salón bajo la atenta mirada de Jaime que no le quitó ojo de encima y, por un momento, pensamos que lo cogería para leerlo, pero por suerte Marta vuelve corriendo por él antes de que eso pasara.
Capítulo 83: Fina llega corriendo al dispensario a ver a su padre, quien ha sufrido un infarto provocado por la cardiopatía avanzada que sufre su corazón desde hace mucho tiempo. Pero Fina no parece aceptar la dura noticia de que a Isidro le quedan pocos días de vida según los doctores Luz y Jaime.
Más tarde en el capítulo, Marta llega al dispensario a visitar al padre de Fina, pero Jaime le dice que hace pocos minutos se lo llevaron a la casa grande y aprovecha para comentarle la gravedad de su estado de salud, entonces Marta muy triste y preocupada por Fina, también empieza a recordar con mucho cariño los momentos vividos con el mayor a lo largo de su vida; como cuando iban al parque y se encargaba de vigilarlos, de buscarlos al colegio y preocuparse por ella y sus hermanos como si fueran de su propia familia. Marta acaba pidiéndole a su marido que dejen la cena que tenían prevista para otro día, a lo que este accede sin problemas.
Ya en el salón de la casa grande, Marta vuelve a escribir en su diario, esta vez para expresar su tristeza y desolación por la próxima partida de Isidro y el dolor que va a infligir su ausencia en Fina. Pero lo que más le duele a Marta es no poder estar al lado del amor de su vida para consolarla y darle apoyo como ella quisiera.
Sin que la De La Reina se diera cuenta, Fina caminaba hacia ella hasta alcanzar una distancia donde Marta pudiera fijarse en su presencia, logrando que Marta se levantara y borrara los metros que las distanciaban.
Marta: Siento mucho lo de tu padre. No me lo quito de la cabeza.
Fina: Es que yo no sé cómo asumirlo.
Marta: Lo siento en el alma. De veras.
Fina: No puede ser que se muera, Marta. No puede ser.
Marta: Anda ven.
Y abrazó a Fina sin pensarlo dos veces, dejando que se refugiara entre sus brazos.
Marta: Tú tranquila. En casa va a estar muy bien cuidado. Y, si sucede cualquier cosa, te avisamos enseguida.
Fina: Ya lo sé.
Marta: Yo estoy aquí para lo que necesites. Si necesitas tomarte un tiempo en la tienda también tienes mi apoyo. ¿Lo sabes?
Fina: Sí, lo sé. Gracias, Marta, de verdad. Es que aún no he decidido cómo lo tengo que hacer. Hoy sí que quiero quedarme a su lado. ¿Y si es verdad y se muere en cualquier momento?
Marta: No, no pienses en eso.
En ese momento, cuando Marta acunaba la cara de Fina con su mano, Jaime hace acto de presencia arruinando el espacio seguro que habían logrado crear en pocos minutos. Fina decide retirarse lo más rápido posible y Jaime invita a su esposa a subir a la habitación con él. Sin embargo, Fina voltea dos veces a ver la escena ante sus ojos, mostrándonos la tristeza y resignación en su mirada.
Fina sale por la puerta que va hacia la habitación de Isidro y Marta sube las escaleras sin mirar atrás, pero Jaime se detiene en medio de estas y observa la puerta por donde Fina desapareció, y luego en dirección a Marta, con un claro signo de extrañez.
¡Ay, Jaimecito, parece que por fin te está cayendo la ficha!
Capítulo 84: Para nuestras Mafin el último capitulo de la semana empieza con Fina dormida en la silla de la habitación de Isidro, quien desde la cama le canta una canción de cuna, la favorita de Fina cuando era pequeña. Fina se despierta y su padre le pide que se acerque para darle un abrazo, diciéndole después que se marche a trabajar sin preocuparse por él, pero su hija le responde que tiene el permiso de Doña Marta para faltar a la tienda y así poder estar con él. Sin embargo, la terquedad es algo que Fina ha heredado de su padre y este insiste hasta que la convence de marcharse a la tienda, dejándolo al cuidado de Digna.
En la tienda, Marta entra por la puerta decidida a hablar con Fina al no verla salir de casa temprano y preocuparse por ella, pero antes, envía a Carmen y Claudia al almacén.
Marta: Ya te dije que puedes tomarte el tiempo que necesites sin pedir baja, que cualquiera de tus compañeras te puede cubrir. Si hace falta, cojo a alguien.
Fina: No. De verdad, no va a hacer falta.
Marta: ¿Pero tú has visto la carita que tienes? Se nota que no has pegado ojo. Fina, lo que no quiero es que ahora te pongas enferma tú.
Fina: No. Voy a descansar después de comer, no te preocupes.
Marta: Como quieras. Ya sabes que me tienes para lo que necesites
Fina le regala una pequeña sonrisa y Marta lucha con todas sus fuerzas por no abrazar a Fina de nuevo, así que se termina marchando.
Transcurre la tarde y Carmen y Claudia están preocupadas por Fina, quien no para de hacer cosas en la tienda de forma automática tratando de no pensar en su padre, pero llega una clienta a la que justo le interesa la loción que usa Isidro, y Fina no puede evitar echarse a llorar, corriendo a la trastienda para refugiarse y hacerlo sin que ningún cliente pueda verla. Claudia va tras ella e intenta consolarla, Fina le pregunta que qué va a hacer si se muere su padre y Claudia le responde que al inicio será muy duro, pero que luego le reconfortará pensar que está en el cielo cuidándola desde ahí. Carmen se les une a las chicas y entre las dos abrazan a una Fina que no tiene consuelo.
¡Por favor, un respiro para Fina! La pobre se ganó el premio gordo en la lotería de las desgracias.
Y esto es todo lo que ha pasado con nuestras chicas esta semana. La situación de Isidro aunque es muy triste, las ayudará a acercarse ya que Marta no dejará a Fina sola en este momento tan duro.
Me sigue fascinando como sin deberse nada, siguen siendo honestas completamente la una con la otra. Marta y Fina nos están mostrando una relación sana, sin reproches, sin mentiras, y llena de muchísima empatía y cuidado. No les hace falta ser pareja para tenerse y apoyarse, porque su amor es más fuerte que cualquier barrera y, aunque Marta esté encerrada en una jaula, no deja de hacer todo lo que esté en su mano para mostrarle a Fina que puede contar con ella.
Por otro lado, Jaime parece que está empezando a sospechar y notar cosas extrañas. El inmenso cariño con el que Marta mira a Fina, lo cálida que es con ella y la preocupación incesante por su bienestar, es más que suficiente para que a Jaime le tiente coger el diario de Marta y leerlo. ¿Lo hará? Creo que estamos muy cerca de descubrirlo.
¡Hasta aquí el ResuMafin de esta semana! A coger aire, porque las curvas que vienen son fuertes.