Isabel Moreno : «Todas las mujeres de la serie tienen algo moderno, iniciativa y poder»

Isabel Moreno, quien da vida a Claudia Díez en Sueños de Libertad, nos abre una ventana a la intimidad de su proceso actoral, revelando cómo sus experiencias personales enriquecen la historia de su personaje. En nuestra cálida y sincera charla, Isabel reflexiona sobre los retos y aprendizajes de interpretar a Claudia en una serie diaria, compartiendo los momentos que han marcado su carrera y los consejos que la inspiran a seguir explorando personajes profundos y humanos.

La entrevista comenzó con el consejo de vida más importante que Isabel ha recibido. Para ella, el aprendizaje ha sido la importancia de valorarse a sí misma. Isabel explicó que solía depender emocionalmente de los demás, pero una persona cercana le dijo:

“Si alguien quiere estar contigo, lo estará; y si no, mejor que tú no quieras estar con esa persona”.

Ese consejo le enseñó a aceptar que no puede forzar relaciones, ayudándola a crear una conexión más profunda con Claudia, quien, al igual que ella, ha pasado de depender de otros a encontrar su propio camino.

Claudia Díez: Un personaje en constante evolución 

Claudia Díez es un personaje que no sigue un camino predecible, lo que la convierte en un reto para cualquier actriz. Isabel se siente especialmente atraída por la complejidad de Claudia, quien está llena de dudas, deseos y frustraciones. “Lo interesante de Claudia es que, a pesar de estar pasando por situaciones difíciles, tiene momentos de luz, de esperanza. No es una villana ni una heroína. Es alguien que lucha por encontrar su propio camino«, comenta Isabel sobre su personaje.

La actriz resalta cómo, aunque Claudia se enfrenta a dificultades, tiene una gran capacidad de crecimiento, lo cual le permite a la audiencia conectar con ella. “Es un personaje que no está estancado. Va cambiando, evoluciona” -prosigue- “Esto es algo que me gusta explorar”.

Cómo Isabel Moreno lidia con las ideas conservadoras de Claudia Díez

Isabel confesó que interpretar a Claudia le plantea un desafío constante, ya que el personaje tiene ideas bastante conservadoras, mientras que ella es todo lo contrario. «Claudia y yo no podríamos ser más distintas en nuestra manera de ver las cosas», explicó. A pesar de esta divergencia, ha desarrollado una empatía hacia perspectivas opuestas, lo que le ha permitido comprender y dar matices al personaje de manera más profunda.

Cuando se le preguntó si en algún momento la mentalidad conservadora de Claudia se le hace difícil de comprender, Isabel reflexionó: «Tengo mucha gente alrededor que es muy creyente y sus ideas son más convencionales, más diferentes a las mías. A veces me parece raro vivirlo en mí, hay frases que digo y pienso ‘Dios, pero bueno, es otra época'».

Isabel también destacó que en ese contexto, lo raro era no ser como Claudia. «Es cierto que todas las mujeres que salimos en la serie tienen algo moderno, mucha iniciativa, poder. Y eso está bien porque nos acerca a nosotras, pero como Claudia también tengo la responsabilidad de mostrar el lado oscuro de la historia: la represión femenina, el poder que tenía la Iglesia sobre nosotras». Isabel se siente dolida por las ideas que su personaje representa, pero también reconoce la importancia de mostrar esa realidad. «A veces me duele hacerlo, pero sé que es necesario. Estamos mostrando una realidad que antes no podíamos ver».

Una amistad que traspasa la pantalla  

Un aspecto que Isabel aprecia de su trabajo en la serie es la fuerte conexión con sus compañeras de reparto. Compartió que su relación con Alba Brunet y Candela Cruz no solo es cercana en pantalla, sino también fuera de ella. «Trabajar con ellas es una bendición. Nos entendemos, reímos y tenemos una química muy especial», dijo Isabel. «Candela me acerca mucho a mi tierra, y Alba siempre es un contrapunto que me ayuda mucho porque porque me hace ver las cosas de forma que a veces no las ves», comentó.

En cuanto a su relación con Marta Belmonte, Isabel explicó que ya se conocían antes de comenzar a trabajar juntas en la serie. «Ya habíamos coincidido en el teatro antes de empezar en la serie». Isabel habla sobre la relación entre Claudia y Doña Marta con mucha simpatía, describiendo a Marta como alguien que tiene una conexión muy especial con su personaje. Aunque al principio el personaje de Claudia entra en la tienda sin pasar por las pruebas, Isabel bromea diciendo que «estaba enchufada» debido a una carta de recomendación que ella misma había escrito. Esto se convierte en un tema recurrente de bromas entre las compañeras, quienes se divierten imaginando lo que podría haber escrito Claudia en esa carta para entrar directamente al trabajo. Isabel también destaca cómo Marta, como personaje, le tiene una gran ternura a Claudia y le consiente algunas cosas.

La relación con Pablo Béjar y los retos de grabar escenas diarias

Isabel Moreno también comparte el reto que supone interpretar escenas intensas en tan solo 25 minutos. Aunque algunas veces se siente preparada y concentrada, en otras ocasiones la rapidez de las grabaciones puede resultar difícil. «A veces me cuesta concentrarme, y en esos momentos, mis compañeras me apoyan y me ayudan a encontrar la emoción que necesito», explicó Isabel.

Además, habló sobre su trabajo con Pablo Béjar, quien interpreta a Mateo, el gran amor de Claudia en la serie. «Ha sido maravilloso trabajar con él. Tenemos una buena dinámica, y eso ha sido clave para las escenas de Claudia y Mateo, especialmente en momentos emotivos para ambos personajes», añadió.

Lo que el futuro depara a Claudia 

Sobre lo que viene para Claudia, Isabel adelantó que su personaje está en un momento de plenitud, finalmente disfrutando de la vida junto a Mateo y enfrentando la maternidad con alegría. Sin embargo, no faltarán los obstáculos. Isabel comentó: «Claudia tiene momentos muy bonitos, después de tanto sufrimiento, por fin puede relajarse. Aunque, como en la vida, las cosas no siempre son fáciles, y algunas curvas se presentarán en la historia«.

Con una evolución continua en su personaje y el apoyo de un elenco que considera su segunda familia, Isabel nos deja expectantes por los próximos episodios. Claudia, un personaje que ha crecido y enfrentado situaciones difíciles, continúa siendo un símbolo de esperanza, valentía y la fuerza de la autovaloración en un contexto que, aunque distante, sigue resonando en el público.

Lo que Isabel Moreno espera de su futuro profesional 

Isabel está en un momento emocionante de su carrera, rodeada de proyectos que le apasionan y que reflejan su evolución personal y profesional. En el set de la serie, disfruta de la dinámica de trabajar codo a codo con sus compañeros, que ya se han convertido en amigos. 

De cara al futuro, Isabel Moreno no oculta sus deseos de explorar papeles diferentes que le permitan mostrar otras facetas y desafiar sus límites como actriz. Sueña con interpretar personajes más oscuros o intensos que se alejen de la bondad que caracteriza a Claudia y, en algún momento, le gustaría embarcarse en proyectos de acción o roles con una carga emocional distinta. Además, está abierta a nuevas oportunidades en cine o teatro, y no descarta colaborar con otros creadores para desarrollar historias que, como actriz, le permitan conectar de manera profunda y auténtica con el público.