Natalia ‘éxtasis’ Lacunza

Natalia Lacunza sigue recorriendo España con su gira de salas y haciendo volar a sus fans con un show que te lleva al más completo estado de éxtasis.

Natalia Lacunza tocaba en Toledo el día 10 y en Madrid el día 15, cerrando el año haciendo parada al día siguiente en Alicante.

A continuación te contamos como fueron los conciertos de Toledo y Madrid con sus respectivas galerías de fotos de la mano de NowMak Photo.

Círculo de Artes de Toledo

El lugar donde todo músico querría tocar. Un espacio espectacular, acogedor y que con el mapeo del logo sobre sus paredes y los leds de colores, lo hicieron brillar creando un ambiente magistral.

Las primeras en salir al escenario eran Ganges y Mira Paula, quienes anunciaron que iban a cantar un par de temas juntas hasta que diese comienzo el concierto de Natalia.

Okinawa, Alice et moi o Godard fueron algunas de las canciones que las componentes de la ya conocida banda de Natalia Lacunza tocaron para amenizar la espera hasta la salida de la navarra al escenario.

Cuando, entre luces y sombras, se vio la silueta de Natalia Lacunza, el publico ensordeció la sala, mientras la joven con una sonrisa que deslumbraba, agradecía el cariño del público toledano.

El tema que da nombre al álbum, Tiene que ser para mi, era el elegido para dar inicio el concierto y como era de esperar, los móviles se alzaron para empezar a grabar acompañados de la melodía del publico cantando con la navarra.

Nuestro nombre y para sorpresa de todos pues pertenece al primer EP, Gata negra fusionada con Crazy serían las siguientes.

El publico cada vez recibía con más emoción las canciones que iba cantando Natalia Lacunza.

Los aplausos, los gritos y los ‘GUAPA‘ se iban adueñando de la sala. Tiempo atrás ponía la calma momentánea para ir dosificando, pues el concierto acababa de empezar.

El círculo arrancaría las palmas de los asistentes, y Cuestión de suerte llenaría de amor el espacio y los corazones de los fans, que hicieron la canción más especial con sus voces retumbando por el Circulo de Artes de Toledo.

Una bandera del colectivo LGTBIQ+ llegaría al escenario lanzada desde el publico.

Y Natalia, que forma parte del colectivo, sin pensarlo se agacho a cogerla para bailar por todo el escenario ondeándola.

‘Este ultimo estribillo lo tienen que cantar ustedes conmigo, por favor. Que se vea, que se vea. Where are my… my lesbian and my gays’ fue lo que la navarra le dijo al publico antes de poner el micrófono para que toda la sala cantase con ella ‘A VECES SIENTO QUE ME MORIRÉ’.

Era el momento de presentar a las que, a dia de hoy, se han convertido en su familia musical. Su banda. Luz Abril a la guitarra, Paula Ruiz al bajo, Kat Almagro y la batería y Ganges al teclado.

Mi sitio y Mejor que yo volvían a poner la calma en el escenario y en la sala, mientras los brazos elevados de los asistentes se balanceaban de lado a lado al ritmo que les había marcado Kat.

Y llegaba el momento mas esperado de la noche, Natalia Lacunza anunciaba que iba a cantar una canción que no había salido aun. Un tema que empieza lento pero que pronto se vuelve en un temazo para saltar y disfrutarlo.

Fuera de tiempo, su colaboración con Inner Cut y Ghouljaboy llegaba en el momento exacto. El publico acogía el tema con mucha ilusión, bailando y cantando, en definitiva, disfrutando de lo que Natalia nos había ofrecido hasta el momento (y esperando lo que quedaba por llegar).

Todo lamento, Cartas de amor con la colaboración de Rup-tura, Muchas cosas… y llegaba el momento que todos estábamos esperando.

Natalia y Ganges se juntan para dar inicio a la canción mas esperada por los fans. Empiezan a salir de la boca de Natalia las primeras estrofas de No me querías tanto y el publico empieza a cantar cada vez mas alto.

‘He ido a terapia, me he cambiado de piso para olvidar lo que hizo ese niñato pijo. Pobre, qué mal lo paso cuando era chico, los hombres malos siempre se hacen ricos‘

Fue la parte del concierto donde el publico más alzó la voz, y donde lo hace en todos los conciertos, para reivindicar la situación que pasó la navarra con su ex.

El momento cómico de la noche llegaba cuando desde el público le hacían llegar a Natalia un trozo de cartón.

Cuando lo giró se encontró con una foto suya de su época en Operación Triunfo a lo que, refiriéndose al publico y en tono jocoso, les comentaba que ‘le daba un poco de miedo’.

Llegaba el turno de Medicina y de nuevo Kat alentaba al publico a encender las linternas de sus moviles para crear un ambiente mágico y emocionar a Natalia.

La joven anunciaba el final del concierto con Todo va a cambiar y el publico no asimilaba que el concierto que tanto habían esperado, estuviese llegando a su fin.

Cuestión de suerte con el pitch subido, bailecito de la banda al completo, Natalia haciéndose be real con los móviles que le ofrecían… y se acabó.

Pero los fans no se quedarían a gusto y cuando Natalia y su banda salieron del escenario, el publico se enfundó en un claro ‘Otra, otra, otra..’

A lo que Natalia respondió saliendo al escenario acompañada de Ganges para cantar Nana triste en acústico y con un silencio sepulcral que solo se rompió para aplaudir el final de la canción.

A continuación os dejamos la galería por NowMak Photo

Ochoymedio Club

Las vibes de que iba a ser un conciertazo volaban por toda la sala.

Con un setlist prácticamente idéntico al de Toledo, el público madrileño tenía ganas de volver a escucharse a coro con Natalia.

Tiene que ser para mi, Nuestro nombre, Gata negra, Crazy… Los madrileños no se dejaban absolutamente una frase sin cantar.

Natalia les confesaba que este, era un concierto muy especial para ella y que llevaba mucho tiempo con ganas de tocar en el Ochoymedio.

La joven seguía con su repertorio… Tiempo atrás, El círculo, Cuestión de suerte y el publico de Madrid acogía cada canción como un chute de éxtasis.

Mi sitio, Mejor que yo, Fuera de tiempo, Todo lamento, Cartas de amor de nuevo con Rup-tura sobre el escenario (se está haciendo una habitual de la gira de Natalia, y eso nos encanta).

Y de nuevo nos encontrábamos ante No me querías tanto. Como ya comenté antes, en esta canción es donde el público más alza la voz dejando a Natalia en un segundo plano, pero no sería el caso en Madrid.

La navarra junto a su público llegaba a la estrofa más marcada para todos, y así fue como afinaron bien la garganta para gritarla bien fuerte con Natalia, que la grito como no la habíamos visto hacerlo en sus anteriores conciertos.

Un desahogo para nosotros el poder cantarlo a pleno pulmón, pero supo mucho mejor al ver como Natalia también descargo su adrenalina con su público.

El momento más especial de la noche madrileña fue cuando Natalia llamaba al escenario a su ex compañera de concurso, María Escarmiento, para cantar juntas un tema de la segunda que se lanzará próximamente.

Tras las conversaciones entre ambas artistas por la red social Twitter durante estas semanas, todos estábamos expectantes sobre si al final, María iría al concierto a cantar con Natalia.

Fue una sorpresa muy grata poder escuchar como empastan sus voces en tremendo temazo.

De nuevo, y en el mismo orden, Medicina con las linternas de los móviles y Todo va a cambiar para un falso final de concierto, donde Natalia volvería al escenario alegando ‘que todavía no nos vamos, que era una broma’

Como ya hicieron en Toledo y para cerrar el concierto, Ganges y Natalia salían al escenario para encogernos el corazón con su versión de Nana triste. En acústico. A piano. Espectacular.

Como fin de fiesta, nos encontraríamos con un cartel proyectado en la pantalla del escenario, donde se anunciaba un concierto de Natalia Lacunza para el 29.09.23 en La Riviera.

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Galería de fotos de parte de NowMak Photo