Chiara Oliver se sincera consigo misma en «Todas las versiones de mí»

Chiara Oliver termina su EP a lo grande con «Todas las versiones de mí», canción que se dedica a sí misma desde lo más profundo con ayuda de su gran amigo, el piano. Además, en la letra de esta canción se mezclan partes en inglés y en castellano, por lo que se mezcla el idioma que más controla la artista junto con el español.

«Todas las versiones de mí»: sinceridad en estado puro

La canción se puede interpretar como un gesto de aceptación de la cantante hacia sí misma. En esta, se puede apreciar cómo la menorquina le habla desde el corazón a todas sus versiones, ya que todas merecen sentirse vistas: «verme hace una semana, hace un mes, hace un año, hace diez y contarme lo que me hago falta«.

A lo largo de la canción también se dirige a otras versiones, como a las que cuestionan sus decisiones y a las que no saben lo que valen. A estas les explica que quizá están siendo demasiado duras consigo mismas y que quizá estén equivocadas. Por ello, entre estas afirmaciones, intercala frases como: «sólo toma mis ojos y ve» o «tal vez no te ves cómo todos te ven«.

Sin embargo, tiene algo en común que decirle a todas ellas y es lo siguiente: «I’m the only one for me«. Así, la artista se demuestra a sí misma que lo más importante de su vida siempre será ella y que se acepta en todos sus colores.

Dando el paso al mundo exterior

No es una sorpresa que el último videoclip del EP comience como el resto: con la artista apuntando el nombre de la canción en su libreta rosa. Tras ese plano, la canción comienza enfocando varias fotos de Chiara de pequeña.

Después, la artista comienza a cantarle a la cámara directamente. A pesar de que su posición será bastante estática, detrás de ella irá fluyendo un sinfín de Kikis diferentes: la que toca la guitarra y el piano, la que salta en la cama, la que baila y muchas otras. Entre estos planos, la cámara va enfocando diferentes fotos que se encuentran por la habitación en las que la menorquina aparece con sus amigas, su familia y en el escenario.

No obstante, una de las fotos se enfoca varias veces y es una en la que sale Chiara de pequeña. Esto puede ser porque quizá quiere hablarle a esa versión un poco más que a las otras para decirle que está bien ser cómo es, ya que en esa edad es importante saberlo.

Quizá lo más destacable del videoclip sucede en el momento en el que la cámara graba a la cantante desde lejos y se ve que la habitación es un plató. Con este simple gesto, se pueden sacar muchas conclusiones. Parece ser que, con el lanzamiento de su EP y, teniendo en cuenta que esta es su última canción, está cerrando un capítulo de su vida que comenzó en Operación Triunfo.

De la misma manera, al representarla pequeña en un sitio tan grande, parece que expresa la dificultad de dar el salto al mundo real. Con la metáfora en mente, los colores son esenciales, ya que durante todo el videoclip las luces son claras. Sin embargo, en este plano, la habitación se mantiene iluminada, pero no lo que hay fuera, lo que puede significar el miedo de cerrar una etapa para comenzar una nueva.

Hace apenas unas horas que ha sucedido el lanzamiento de «La libreta rosa» y la gente ha quedado más que satisfecha con el trabajo realizado. El tiempo de espera ha merecido la pena y ahora el público de la menorquina podrá escuchar todas las canciones en bucle. Asimismo, no habrá que esperar mucho para verla en directo, ya que su gira comenzará en unos pocos meses. Y, vosotras chicas, ¿qué opináis? ¿Cuál es vuestra canción favorita?